No recuerdo haber leido una novela sobre terrores de alta mar tan fantástico como esta obra. El mar sigue siendo el actor principal de muchas historias por lo insondable e ignoto que tiene, pero la capacidad de explotar de forma terrorífica ese medio no natural nuestro, muy pocos lo han conseguido con igual intensidad que Hodgson. Y es que su mar o el de nuestras pesadillas, está plagado de presencias fantasmales y monstruosas.
No es una novedad la gran capacidad que tiene Hodgson de aunar el ambiente marino con la atmósfera sobrenatural de la que tanto han aprendido grandes escritores como Lovercraft o Machen. En este volumen, nos encontramos con ocho relatos de terror magistral que consiguen crear desde la primera línea desasosiego y espanto por igual. Es un maestro que domina las claves del relato de terror, donde un ambiente seguro, tranquilo y cotidiano se vuelve poco a poco siniestro y peligroso hasta que se convierte en pesadilla de la que no se puede escapar.
No creo que sea la mejor obra de Hodgson, pero los relatos recopilados en este volumen representan el espíritu oscuro de su obra. Pese a ser uno de los escritores de terror más interesantes del siglo XX, es prácticamente un desconocido por el gran público. Enrolado en la marina mercante a los 13 años, sus experiencias durante 8 años en un entorno tan hostil como el marino han sido la base sobre la que fraguó toda su obra. Y el cuento que da nombre a esta obra, que en el momento de su edición pasó con más pena que gloria, es su primer escrito. Murió a los 40 en la primera guerra mundial por una granada alemana, dejando como legado un abultado número de cuentos y un grupo de interesantes novelas, casi en su integridad de temática fantástica.
No es un libro que recomendaría a cualquiera, pero si has disfrutado con Jack London o Emilio Salgari, es posible que esta vuelta de tuerca sobrenatural te sorprenda y entusiasme por igual.
No es una novedad la gran capacidad que tiene Hodgson de aunar el ambiente marino con la atmósfera sobrenatural de la que tanto han aprendido grandes escritores como Lovercraft o Machen. En este volumen, nos encontramos con ocho relatos de terror magistral que consiguen crear desde la primera línea desasosiego y espanto por igual. Es un maestro que domina las claves del relato de terror, donde un ambiente seguro, tranquilo y cotidiano se vuelve poco a poco siniestro y peligroso hasta que se convierte en pesadilla de la que no se puede escapar.
No creo que sea la mejor obra de Hodgson, pero los relatos recopilados en este volumen representan el espíritu oscuro de su obra. Pese a ser uno de los escritores de terror más interesantes del siglo XX, es prácticamente un desconocido por el gran público. Enrolado en la marina mercante a los 13 años, sus experiencias durante 8 años en un entorno tan hostil como el marino han sido la base sobre la que fraguó toda su obra. Y el cuento que da nombre a esta obra, que en el momento de su edición pasó con más pena que gloria, es su primer escrito. Murió a los 40 en la primera guerra mundial por una granada alemana, dejando como legado un abultado número de cuentos y un grupo de interesantes novelas, casi en su integridad de temática fantástica.
No es un libro que recomendaría a cualquiera, pero si has disfrutado con Jack London o Emilio Salgari, es posible que esta vuelta de tuerca sobrenatural te sorprenda y entusiasme por igual.
