sábado, 12 de septiembre de 2009

Distrito 9. Casi un 10 de película.


No he leido ninguna crítica de la película, por lo que supongo mi opinión sobre la misma es bastante sincera. Creo que tenemos ante nosotros una gran película de ciencia ficción (o acción, según como se mire) que consigue engancharte desde el primer momento. Se agradece todo; el rodaje en formato documental (que ya nos sorprendió en Monstruoso, pero que aquí lo supera con creces), la perfecta ambientación de los escenarios, la maestría técnica con que dan vida a los alienígenas (que nos hacen olvidar por completo que no son más que 3d avanzado), y sobre todo, que se atreva a poner como protagonista a un antihéroe tan alejado del machote bizarro de producciones parecidos como Independence Day o incluso Predator (un sospechoso clon del ridículo protagonista del Chip Prodigioso).

No es exactamente lo que cuenta, sino el cómo lo cuenta. La historia hace un salto temporal y nos situa el inicio de la acción a los 20 años del aterrizaje de los extraterrestres en la tierra, y no cuento más... El que la historia transcurra en un gheto de Sudáfrica entiendo que no es gratuito, aunque por suerte solo se trata de un mínimo guiño a este vergonzoso episódio de nuestra historia actual. De esto tampoco cuento más...

No esperaba ni más ni menos de Peter Jackson, aunque en este caso solo sea el productor. Cuando la estaba viendo, recordé que su primera película, "Mal gusto", en principio era una cinta de acción violenta, aunque poco a poco se le fue yendo la mano y se acabó transformando en la vacilada gore que todos (casi todos) conocemos. Y es que aunque Peter Jackson se ha refinado mucho desde sus inicios, su esencia paranoica hemoglobulínica sigue intacta. Por suerte.

No se si habrá un Distrito 10, es posible que si puesto que la película apunta maneras, pero no puedo dejar de pensar en cómo será, y sobre todo, cuando...